ROBERTO CARLÉS, EL 5TO MIEMBRO Y LA VULGARIDAD QUE PROPONE LA SIMPLIFICACIÓN A LA CUAL NOS TIENE MUY HABITUADOS EL COLECTIVO QUE COMPONE LA RESTAURACIÓN CONSERVADORA
"Los que impugnan a Carlés por ser joven son los mismos que querían
bajar la edad de imputabilidad" (Graciana Peñafort)
La funcionaria advirtió que “los que dicen que
alguien es demasiado joven” para formar parte del alto tribunal “son los mismos
que hace unos meses querían bajar la edad de imputabilidad”. Además
subrayó que el abogado propuesto por el Gobierno para ocupar el lugar que dejó
vacante Eugenio Raúl Zaffaroni con su renuncia, en diciembre del año pasado,
“es un joven formado que ha trabajado con seriedad y profesionalidad en el
nuevo Código Penal”. En ese marco, fustigó a los dirigentes de la
oposición y algunos representantes de la Justicia que ya manifestaron su
rechazo a la designación de Carlés apuntando principalmente a su edad. “Qué
extraño... los mismos que dicen que alguien es demasiado joven para la Corte
son los mismos que hace unos meses querían bajar la edad de imputabilidad. O
sea, si sos joven y pobre podés ir a la cárcel; ahora, si sos joven, no podés
llegar a la Corte”, analizó Peñafort. Asimismo, señaló que “la Corte
debe completarse” y volver a contar con cinco miembros. “No entiendo la
locura antirrepública de los opositores que firman un compromiso para no ocupar
las vacantes de la Corte”, dijo la funcionaria del Ministerio de Defensa en
declaraciones formuladas esta mañana a radio América, al tiempo que destacó que
“si ha habido un gobierno que ha propuesto una Corte de Justicia distinta, con
criterio propio, ha sido este gobierno”. Finalmente, Peñafort abogó por
“apostar a gente joven, formada, que trae nuevas ideas”.
Fuente: Telam
Cometario
Gustave Flaubert
afirmaba que la imbecilidad es una roca inexpugnable. Todo el que choca contra
ella se despedaza. Y eso es lo que nos está ocurriendo en la coyuntura. Esa
roca tiene varios minerales asociados y luego de un tiempo ha logrado una
metamorfosis regresiva que nos conduce invariablemente a los avernos más
oscuros. Medios de comunicación, corporaciones globales, los intereses
geopolíticos del norte dominante, los servicios de inteligencia internos y
externos y sus propias competencias, una oposición política famélica y
subsumida a favor de esos poderes concentrados y excluyentes, una casta
jurídica conservadora y omnipresente dominando el poder judicial, son los
componentes químicos de esa roca inexpugnable, por eso la rebeldía es el único
refugio digno de la inteligencia frente a la imbecilidad, tal cual sentenciara
el escritor español Arturo Pérez Reverte. Y no hay manera que tal rebeldía no
parta de las nuevas generaciones. Y allí está parado el Dr. Roberto Carlés
portando sus peores pecados. Esta roca inexpugnable tiene la enorme capacidad
de no dejarse contaminar por el campo de las ideas, cosa que nuestra oposición
exhibe sin solución de continuidad y sin pudor alguno. Massa, Macri, Binner,
Carrió, De la Sota, Sanz, Morales, Juez entre otros, laboran dentro de esa roca
como cristales necesarios, elementos indispensables en la fusión, aunque
perfectamente reemplazables entre sí; la cuestión es ser funcionales a dicha
“inexpugnabilidad” y que la misma se lleve a cabo desde la legalidad bajo el
sofisma que propone una lectura ciertamente falaz del sistema democrático.
Desde hace doce años nos estamos chocando con esa roca que intenta restaurar el
orden conservador en Argentina, aún estando nosotros muy lejos de finalizar la
tarea. La 125, la ley de medios, la reforma judicial, el nombramiento de
fiscales, son claras muestras que el poder real de esa roca inexpugnable supera
largamente cualquier intención reformista de carácter progresista, aún tenido
legítimas mayorías… La sobresimplificación es la forma más común de la
estupidez decía el filósofo hansista José Luis Córdoba, y cuánto de ella hay en
nuestro actual vértigo político. La simplificación, la generalización coloca al
sentido común en medio del escenario, nada más funcional a los fines de la
reacción. Tiene 33 años y tiene simpatías políticas con el oficialismo, con eso
alcanza y sobra como argumento…
Si sobre cuestiones
etarias se trata es mejor que lo diga Serrat...
Si no estuviese tan
oscuro
a la vuelta de la esquina...
O simplemente si todos
entendiésemos que todos
llevamos un viejo encima.
a la vuelta de la esquina...
O simplemente si todos
entendiésemos que todos
llevamos un viejo encima.
El otro día denunciaba un senador estadounidense demócrata (fijate a quien estoy citando!) que la sociedad norteamericana está ingresando aceleradamente por el camino que cita Flaubert y a ello colabora el que se han vaciado sin pausa y progresivamente los espacios públicos de comunicación de contenidos (ponele un simil a lo que aquí sería el Canal Encuentro y como para empezar).
ResponderEliminarY aquí desistí hace rato discutir con opositores más que nada por ello, por ese grado de desinformación. Uno de los planteos que les hago es que sucedería de llegar a gobierno lo que votan, en tanto por más sumisos que se muestren inevitablemente van a ser operados y les habrán de mover el piso los mismos en quienes ahora se apoyan. Creo que ni siquiera suponen ese escenario ya que entre otras cosas han renunciado a su vocación de poder y con ello al hecho de hacer política. Hoy la política se la sarandean entre los medios y la justicia.
Todo lo que vos quieras Gustavo con lo de la estigmatización etaria pero lo de Fayt no tiene nombre. Debemos estra en el Guinnes.
ResponderEliminarCon haberle dicho a E. Feimann que es un cabeza de termo , Carles merece mi mayor admiracion.
ResponderEliminarPor otro lado, que la edad fue establecida por los constutuyentes y no es un de discusion.
Quise decir, perdon, que la edad de los jueces fue establecida por los constituyentes y no es un tema de discusion.
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