Documento de reconocidos economistas e intelectuales ante la ONU a favor de crear una convención sobre deuda soberana. Mientras tanto nuestros intelectuales y economistas siguen dando asco
La
nota cursada a Naciones Unidas destaca que “los mercados de deuda soberana
juegan, hoy día, un destacado rol en la economía global” y que las crisis de
los mismos “pueden interrumpir procesos de desarrollo de forma significativa”.En
este sentido, señala “en dichas circunstancias debería existir una forma de
reestructurar las deudas” para garantizar un nuevo comienzo ordenado que apunte
a una mayor equidad. La misiva lleva la firma, además de Stiglitz y Solow, del
vicepresidente de Brookings Institution, Termal Dervis; del profesor de
economía de la Jawaharial Nehru Universisty, New Delhi y Secretario Ejecutivo
de IDEAS, Jayati Ghosh; y de los docentes de la Escuela de Ciencias Sociales en
el Instituto de Estudios Avanzados en Princeton, Dani Rodrik y Albert O.
Hirshman. También del profesor de Ciencias Políticas y Económicas de la Yale
University, John Roemer; y del ministro de Relaciones Exteriores y Culto de la
República Argentina, Héctor Timerman. Los intelectuales destacaron que todos
los países han desarrollado mecanismos para resolver estas cuestiones
“ordenadamente” en casos de deudas privadas, pero “lamentablemente, no existe
un mecanismo comparable para las deudas soberanas”. “La importancia de esta
laguna, con sus serias repercusiones, ha sido reconocida en múltiples ocasiones
por el FMI y por la Comisión Internacional de Expertos en Reformas del Sistema
Monetario y Financiero Internacional, convocada por el Presidente de la
Asamblea General de las Naciones Unidas”, señala el documento. Al respecto,
recordaron que en 2009 el informe de esa Comisión llamó a los Estados a
“explorar aproximaciones mejoradas para la reestructuración de deuda soberana…”
y posteriormente fue incorporado por la Resolución 65/143, adoptada por la 66°
Sesión de la Asamblea General de Naciones Unidas, el 20 de diciembre de 2010. Esa
resolución reconoció la “necesidad urgente de mejorar la coherencia, gobernanza
y consistencia de los sistemas monetarios y financieros internacionales” y
reafirmó “que la Organización de las Naciones Unidas está bien posicionada para
participar en una variedad de procesos de reformas tendientes a mejorar y
fortalecer el funcionamiento efectivo del sistema y de la arquitectura
financiera internacional”. Los intelectuales destacaron que “eventos recientes
han puesto a la luz los riesgos de no contar con un mecanismo de
reestructuración de la deuda soberana de esa naturaleza” e indicaron que dicha
ausencia “ha motivado la aparición de comportamientos especulativos
desestabilizadores en los mercados internacionales de deuda”.
Entre las consecuencias de estos procesos mencionaron “que la habilidad de los países en dificultades para resolver los problemas de deuda a tiempo se ha visto seriamente comprometida” y que los atrasos en las reestructuraciones de deuda “resultaron costosos tanto para los Estados soberanos como para los inversores de buena fe”. “Estos eventos recientes y los efectos adversos potenciales para la economía global, la estabilidad política y social hacen del llamado a una reunión como la que ahora proponemos una cuestión de urgencia” explicaron y afirmaron estar “preparados para proveerles los fundamentos analíticos del caso para la convocatoria de la reunión”.
Entre las consecuencias de estos procesos mencionaron “que la habilidad de los países en dificultades para resolver los problemas de deuda a tiempo se ha visto seriamente comprometida” y que los atrasos en las reestructuraciones de deuda “resultaron costosos tanto para los Estados soberanos como para los inversores de buena fe”. “Estos eventos recientes y los efectos adversos potenciales para la economía global, la estabilidad política y social hacen del llamado a una reunión como la que ahora proponemos una cuestión de urgencia” explicaron y afirmaron estar “preparados para proveerles los fundamentos analíticos del caso para la convocatoria de la reunión”.
Texto
original:
Señor
Secretario General de Naciones Unidas,
Ban
Ki- moon y Señor Presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, John
W. Ashe
1st Ave. and 46th street New York, NY 10017 USA
Estimado
Señor,
Tenemos
el agrado de dirigirnos a usted con el objeto de alentarlo a apoyar el lanzamiento de un proceso en el seno de las
Naciones Unidas tendiente a la elaboración de una Convención para la reestructuración de
la deuda soberana. Los mercados de deuda soberana juegan, hoy día, un destacado
rol en la economía global. Si bien el acceso al financiamiento puede ser
particularmente vital para los países en desarrollo y mercados emergentes,
resulta sin dudas importante para todos los países que las crisis por deuda soberana pueden
interrumpir procesos de desarrollo de forma significativa. Es ampliamente reconocido que en dichas
circunstancias debería existir una forma de reestructurar las deudas. La
necesidad de un nuevo comienzo ordenado es tanto una cuestión de eficiencia como
de equidad. Todos los países han desarrollado mecanismos para resolver estas
cuestiones “ordenadamente” en casos de
deudas privadas, a través de leyes de quiebra, considerados hoy como
componentes vitales de una economía de mercado. Pero, lamentablemente, no existe un mecanismo
comparable para las deudas soberanas. La importancia de esta laguna, con sus
serias repercusiones, ha sido reconocida en múltiples ocasiones por el FMI y
por la Comisión Internacional de Expertos en Reformas del Sistema Monetario y
Financiero Internaci onal, convocada por el Presidente de la Asamblea General
de las Naciones Unidas. El informe de dicha Comisión en el año 2009 (ver en
particular su cap ítulo 4) que fue endosado por la
Conferencia
de Naciones Unidas sobre Crisis Financieras y Económicas Mundiales y sobre su Impacto
en el Desarrollo (New York 24 -26, A/CONF.214/3), llama a los Estados a “explorar aproximaciones mejoradas
para la reestructuración de deuda soberana...”. El Informe fue también tomado
en cuenta por la Resolución 65/143, adoptada por la 66° Sesión de la Asamblea
General de Naciones Unidas, el 20 de diciembre de 2010. La Resolución reconoció
la “necesidad urgente de mejorar la coherencia, gobernanza y consistencia de
los sistemas monetarios y financieros internacionales” y reafirmó “que la Organización de las Naciones Unidas está
bien posicionada para participar en una variedad de procesos de reformas
tendientes a mejorar y fortalecer el funcionamiento efectivo del sistema y de
la arquitectura financiera internacional”. Eventos recientes han puesto a la
luz los riesgos de no contar con un mecanismo de reestructuración de la deuda
soberana de esa naturaleza. Su ausencia, de hecho, ha motivado la aparición de comportamientos
especulativos desestabilizadores en los mercados internacionales
de deuda. La consecuencia es que la habilidad de los países en dificultades
para resolver los problemas de deuda a tiempo se ha visto seriamente comprometida.
Es ampliamente aceptado que los atrasos en las reestructuraciones de deuda son
costosos tanto para los Estados soberanos como para los inversores de buena fe.
Estos eventos recientes y los efectos adversos potenciales para la economía
global, la estabilidad política y social
hacen del llamado a una reunión como la que ahora proponemos una cuestión de
urgencia. Estamos preparados para proveerles los fundamentos analíticos del
caso para la convocatoria de la reunión.
Sinceramente,
Joseph
Stiglitz, Premio Nobel de Economía, 2001, Profesor de la Universidad de Columbia
Robert
Solow, Premio Nobe l de Economía, 1987, Profesor Emérito del MIT
Termal
Dervis, Vicepresidentes, Brookings Institution
Jayati
Ghosh, Profesor de Economía de la Jawaharial Nehru Universisty, New Delhi y Secretario
Ejecutivo de IDEAS.
Dani
Rodrik, Albert O. Hirshman, Profes or de la Escuela de Ciencias Sociales en el Instituto
de Estudios Avanzados en Princeton, New Jersey
John
Roemer, Profesor de Ciencias Políticas y Económicas, Yale University
Fuente: Telam
¿Quienes son esos piruchos? Yo no se porque pierde el tiempo Gustavo reproduciendo esa gansadas en ves de difundir los profundois y prácticos pensamientos esclarecedores del Senador Gerardo Morales!
ResponderEliminarTenés razón Antonio. Ahora bién. Luego de la detallada disertación radial de Morales con respecto al fallo Griesa y cómo salir de él, en dónde lo ubicamos: como intelectual, como economista o simplemente como un cipayo de luces apagadas digno de Sin Codificar y su famoso segmento "Hablemos sin saber".
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